El capitalismo autodestructivo

El otro día me mandó un alumno un artículo para que le dijese qué me parecía. El artículo en cuestión era "El Capitalismo autodestructivo" en el que basándose en la crítica marxista al capitalismo, augura un futuro aterrador con tasas crecientes de desempleo y sustitución de factor trabajo por factor capital. La verdad es que el artículo no ahonda en detalles y se queda en una pincelada sensacionalista que capta la atención del profano y asusta al pobre Jon, que aterrado acude a su profesor para que le diga si es verdad o no. Yo creo que nadie sabe cuál va a ser el futuro del sistema, pero no hay nada mejor para saber lo que va a ocurrir que mirar en el pasado lo que ya ha ocurrido y aprender de esos hechos. El capitalismo es un sistema, a mi modo de ver, lleno de imperfecciones, pero que a todos en esta parte del mundo nos gusta, porque quien más, quien menos, conseguimos en esta sociedad cubrir nuestras necesidades básicas y asegurarlas en el futuro. Seguro que si preguntamos a una desesperada madre etíope no opinará lo mismo, pero es a Jon al que quiero tranquilizar. No podemos olvidar que eso ha sido así gracias a una determinante intervención por parte del Estado que asegura ese bienestar.

Sin embargo, cuando hay crisis como la actual, que es más una crisis de valores que económica o financiera, empiezan a proliferar opiniones agoreras que tienen bastante poco fundamento científico. No es mi intención aburrir al personal con argumentos complejos, más sabiendo que al destinatario del artículo no le atrae la dialéctica gratuita, pero me gustaría resaltar una característica del sistema que en mi opinión es la más importante, y es su  

capacidad de adaptación.

Después de crack del 29, vino el New Deal, y más tarde se volvió a postulados clásicos en los que se restringía el papel del estado que poco antes había sido determinante. En el año 2008, muchos autores (entre ellos Joaquín Estefanía en su artículo "El mundo después del Crash") defendieron la necesidad de refundar el capitalismo, ya que los estados habían tenido que acudir a "salvar a los bancos" en vista de que el propio sistema no era capaz de hacerlo (bastó con el ejemplo de Lehman Brothers para darse cuenta que si no se intervenía, el sistema iba a dejar caer su peligroso dominó financiero). pero ahora de nuevo, volvemos a un escenario de ajustes presupuestarios, recortes en el gasto público y flexibilización del mercado laboral. Un giro de timón de 180º en...CUATRO AÑOS!!!

Es fantástica la capacidad de adaptación del sistema y a pesar de su lógica fagocitaria, me da la sensación de que tenemos capitalismo para rato, a no ser que alguien sea suficientemente audaz para plantear un sistema alternativo que de respuesta a los problemas actuales de una manera más humanizadora (que no es dificil). Un ejemplo lo tenemos en el siguiente video. Es hora de ser valientes y audaces para tomar decisiones difíciles pero sostenibles...